| El hecho comenzó hace aproximadamente cuatro años, aunque en el último año cobró inusitada fuerza, al punto que a su alrededor se conformó un grupo de fieles que ya construyó un santuario propio, y organizó hace quince días un vía crucis.
Un cisma va camino de ocurrir en medio de la comunidad católica de Chajarí, en el departamento Federación, frente a la existencia de una farmacéutica de 31 años que dice recibir mensajes de la Virgen María.
El hecho comenzó hace aproximadamente cuatro años, aunque en el último año cobró inusitada fuerza, al punto que a su alrededor se conformó un grupo de fieles que ya construyó un santuario propio, y organizó hace quince días un vía crucis.
Molesta por la dimensión que alcanzó, la Iglesia, a través del Obispado de Concordia, salió a poner en dudas los mensajes como real expresión de la Virgen, y advirtió que podría tratarse de la intervención del demonio.
“Una persona que afirme haber recibido una revelación no está obligada a creerla. Lo que sí debe hacer, antes que nada, es someter dicha revelación a un sacerdote o director espiritual, orando humilde e intensamente, para que ésto se aclare y luego si el caso da para más, elevarlo al Obispo. Este camino de prudencia y humildad, ni la Virgen, ni nadie, lo puede dejar de lado. ¿Por qué? Porque aquí se juega algo más alto: el bien de la comunidad eclesial, que está por encima de todo, pues el Espíritu guía a la Iglesia para crecer en el amor y la unidad”, dijeron, en un comunicado que se leyó en las misas del domingo último, los sacerdotes de Federación, Chajarí, Villa del Rosario, Federal y San Jaime de la Frontera.
El presbítero Jorge Charreu, párroco de María Auxiliadora de Chajarí, y uno de los firmantes de aquel documento, dijo que el punto de quiebre entre la Iglesia y María Paula Carril de Mármol, la mujer que supuestamente tiene contactos con la Virgen, se disparó cuando “nosotros descubrimos que no había en los mensajes de la cosas claras”.
Claro que en principio, aclaró, hubo prudencia, hasta que la situación se salió de cauce. “No vemos nada verdadero en los mensajes que dice recibir de la Virgen. Vemos mucho engaño. Además, siembra muchas dudas, quiere involucrar al obispo, diciendo que es su mejor amigo, y el obispo estuvo una sola vez con ella. Y pretende poner a María por sobre la Iglesia”, contó.
—¿En qué no es verdadero lo que dice recibir de la Virgen?
—Hay errores doctrinales gruesos. Por ejemplo, en un mensaje le dice a los sacerdotes que les demos la comunión a quienes se sientan en pecado, y eso está en contra del sacramento de la reconciliacion.
También supuestamente la Virgen pide formar un grupo de fieles que en su escapulario deben llevar un cuarto de hostia consagrada, y para la Iglesia eso es profanación. Frente a ese tipo de cosas, lo que nosotros tratamos de hacerle ver a la gente es que el diablo también puede actuar así.
—¿Cómo se explican el fenómeno que se creó alrededor?
—Me parece que quieren crear aquí otra Salta (N del R: alude al caso de María Livia, una mujer salteña que dice recibir mensajes de la Virgen, que la Iglesia no reconoce como verdaderos).
Acá no puede haber mensajes verdaderos de la Virgen, porque la Virgen no busca la división. Y con estos supuestos mensajes, pareciera que María persigue la desunión de sus hijos. A Jesús lo presenta como un esclavo de la Virgen. Y también dice que la Virgen le pide silencio sobre los mensajes, pero esta mujer sale a hablar por todos los medios, y poner en dudas la actitud de algunos sacerdotes.
[b]Silencio [/b]
Alrededor de las apariciones surgió en Chajarí la Agrupación Sagrada Familia Madre María (Asafamm) que se autodefine como “independiente” y al aguardo de la aprobación del obispo de Concordia, Armando Collauzol para darle entidad de funcionamiento a nivel eclesiástico.
En el boletín Nº 1, de marzo último, Asafamm da cuenta que “en nuestra ciudad se vienen produciendo fenómenos similares a los que ocurren en nuestra hermana provincia de Salta”.
A la vez, sostiene que en su función la institución “no hace más que cumplir con los pedidos obrados por nuestra Madre María. Mensajes que se darán a conocer en el próximo boletín”.
Pero el presbítero Oscar Rigoni, responsable del área de Medios de Comunicación del Obispado de Concordia, dijo que no hay autorización de la Iglesia para lo que ocurre en Chajarí, y añadió que si bien hubo un intento de acompañamiento espiritual, finalmente no prosperó.
“Y frente a la situación de confusión que se había creado alrededor de todo esto, se creyó necesario sacar un documento que esclareciera un poco todo esto”, puntualizó el sacerdote.
El padre Charreu agregó otro dato. En su opinión, Asafamm pretende actuar por “fuera de la Iglesia, desobedeciendo la autoridad”, también que la Virgen “pide cosas que van en contra de la autoridad de la Iglesia”, y que quien recibe los mensajes dice ser una persona “mística”, y en “cartas trata de energúmenos a los sacerdotes”.
En el mensaje de los religiosos —que firman Aníbal Aguilera, Santiago Baldasari, Elías Benitti, Jorge Charreún, Rosendo Cocco y Prudencio Percara, sacerdotes del decanato norte de la diócesis de Concordia— catalogan como “supuesta revelación privada de María” hacia María Paula Carril.
“La Iglesia jamás pide a nadie aferrarse a ninguna revelación o aparición, por espectaculares que puedan ser. Cuida sí, que la devoción no se desvíe, ni se separe del papel antes mencionado. La única revelación que debemos creer es la que se cerró con Cristo y los Apóstoles”, plantearon los sacerdotes.
Y agregaron que “no podemos ahora hacer una cuestión de conciencia creer o no creer en una supuesta revelación privada de María. Menos aún favorecer o colaborar en una situación que está lejos de ser clara, y más aún que ha sido expresamente examinada y reprobada por el señor obispo”.
[b]“Si esto no es de Dios, no continuará” [/b]
María Paula Carril, la mujer que supuestamente recibe revelaciones y mensajes de la Virgen María, es reacia al contacto con los medios. Es más, son contadas las veces en las que habló con un medio de comunicación.
Una de esas pocas ocasiones en las que accedió a un reportaje fue hace dos días a través de FM Libertad, de Chajarí, texto que reprodujo el semanario Tal Cual.
“Si lo que nosotros hicimos sirvió para que más gente fuera a misa, se confesara, que se acercará a Jesús, que llegarán a la Eucaristía, para que los sacerdotes volvieran a los libros, para que las misas en vez de durar veinte minutos duren una hora, porque el Evangelio sea una gloria escucharlo, para que la gente salga contenta e identificados con ellos, aleluya”, dijo.
Respecto de las apariciones que la Iglesia pone en dudas, sostuvo que “Dios habla no sólo a través de palabras, sino también a través de hechos. Si esto no es de Dios, no continuará, no recibirán gracias; hay que esperar”
—¿Qué relación tenía con el Padre Marcelo Dalmazzo, cuando él estaba en Chajarí? —le preguntaron desde los micrófonos de FM Libertad.
—Una cosa es la persona y otra es la profesión, en este caso el sacerdocio, el trabajo que la persona desempeña en la comunidad. Yo no me relacioné con el padre Dalmazzo de manera privada, fuera de su ámbito ecuménico; yo lo conocí como sacerdote. Él nos apoyó y apoya como otros sacerdotes, inclusive ante los últimos comentarios nos llamó para darnos fuerza (...) Los mensajes no pueden ser dichos hasta que el Obispo nos dé el permiso, cosa que no se ha respetado. Es muy grave porque se ha descontextualizado y se ha pasado por encima del Obispo, que no es la Santa Iglesia, pero pasar por encima de su autoridad es grave.
[b]Qué recomienda la Iglesia[/b]
El documento del Obispado de Concordia plantea los pasos a seguir ante supuestos casos de revelaciones.
A saber:
• Una persona que afirme haber recibido una “revelación” no está obligada a creerla. Lo que sí debe hacer, antes que nada, es someter dicha revelación a un sacerdote o director espiritual, orando humilde e intensamente, para que ésto se aclare y luego si el caso da para más, elevarlo al Obispo.
• Este camino de prudencia y humildad, ni la Virgen, ni nadie, lo puede dejar de lado. ¿Por qué? Porque aquí se juega algo más alto: el bien de la comunidad eclesial, que está por encima de todo, pues el Espíritu guía a la Iglesia para crecer en el amor y la unidad.
• Más vale dejar de lado, humildemente, las mejores
“revelaciones” y obedecer a la autoridad, que es obedecer a Cristo.
• Los supuestos milagros no demuestran que la revelación sea verdadera.
• Es de gran prudencia, incluso de sensatez, tener mucha cautela, y no dejarse llevar por los “relumbrones” de milagros, revelaciones, visiones (que se dan, muy a la ligera, por veraces) con que se trata de ganar adeptos y atarlos produciendo miedo.
• No debemos olvidar que a veces: los carismas o dones que Dios regala para bien de la comunidad, pueden ser mal usados, y producir un efecto contrario.
• Que nadie se sume, ni secunde esta situación, para no crear más dudas y confusiones, que es lo que busca el demonio: aún en lo mejor, crear confusión, desconfianza y desunión total, romper la comunión de la comunidad eclesial.
Fuente: El Diario.
