Viernes 18 de Diciembre de 2009, 15:31

Urribarri: "Se va revisar el impuesto inmobiliario rural sobre la

| El gobernador Sergio Urribarri anticipó que el próximo año se revisará el esquema del impuesto inmobiliario rural que salió aprobado hace unos meses en la Legislatura. Luego de las modificaciones que se le introdujeron en las Cámaras legislativas, la emisión se situó entre los 75 y los 77 millones. Es decir, el Estado resignó a favor de 2860 propietarios, dueños de 3,1 millones de hectáreas entrerrianas, unos 45 millones de pesos. El gobernador ratificó que, pese a que Santa Fe, integrante de la Región Centro, reinstalará el impuesto a los ingresos brutos para la industria, esa medida no se tomará en Entre Ríos.

Urribarri precisó con son “muchos” los millones de pesos que el Estado dejará de recaudar en concepto de impuesto inmobiliario rural por la manera en que salió la ley de grandes superficies de la Legislatura. Por eso, anticipó que la normativa “se va a revisar”. “Vamos a trabajar en enero y febrero en el tema tributario de manera responsable y buscando darle mucha más equidad a los tributos en Entre Ríos”, precisó. Según las estimaciones que maneja la Secretaría de la Producción, si se hubiera aprobado el proyecto tal como lo mandó el Ejecutivo, desgravando a los pequeños productores (49 mil, que poseen 3,9 millones de hectáreas) y recargando el peso en las grandes superficies, se habría emitido un total de 120 millones de pesos al año en concepto de inmobiliario rural. Pero, luego de las modificaciones que se le introdujeron en las Cámaras legislativas, la emisión se situó entre los 75 y los 77 millones. Es decir, el Estado resignó a favor de 2860 propietarios, dueños de 3,1 millones de hectáreas entrerrianas, unos 45 millones de pesos. “El proyecto de ley de pooles de siembra apuntaba a gravar a las grandes extensiones o a las explotaciones de capitales foráneos”, recordó Urribarri. Luego, mencionó que existe “coincidencia casi plena de que tiene unas imperfecciones el texto (sancionado en la Legislatura) que haría imposible la reglamentación. Si lo podemos salvar lo salvamos, y si no seguro que va a mandarse una iniciativa que va a tener el mismo espíritu que la ley de pooles de siembra”, anticipó. Mientras el gobierno socialista de la provincia de Santa Fe busca tapar el rojo fiscal de 1.600 millones de pesos anuales con la instauración del impuesto a los ingresos brutos (IIBB) a las industrias que facturen más de dos millones de pesos al año y a la construcción, esta posibilidad fue descartada por el mandatario entrerriano. “Hice un compromiso y soy de cumplir con la palabra: dije que hasta el último día de mi gestión no iba a implementar el impuesto sobre los ingresos brutos a la industria. Y lo voy a mantener”, postuló. La causa de esta determinación es que se trata “del sector donde tenemos mayor potencial para crecer y hemos comprobado que es donde se genera trabajo decente en serio”, consignó Urribarri. “Lo mío fue un compromiso muy claro. Di señales muy concretas al sector y no puedo cambiar las reglas de juego”, subrayó. Desde que los nuevos gobiernos provinciales surgidos en 2003 decidieron consolidar la Región Centro, un punto saliente fue la asimetría impositiva entre Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos. La más evidente fue la carga fiscal sobre la nómina salarial, que la vecina provincia eliminó y que, con reducciones, nuestra provincia mantiene vía la 4035. Este giro en Santa Fe incorpora otro elemento de disparidad Con respecto a la compatibilización con Santa Fe, Urribarri comentó que habló de estas cuestiones con el gobernador de la vecina provincia. “Tendremos que seguir evaluando para ir eliminando, en alguna medida, las asimetrías”, expresó al respecto. El mandatario remarcó la decisión que ha tenido su administración, manteniendo la “sensatez y prudencia en los gastos” para soportar la crisis internacional. “La variable que más claramente indica la performance de la Provincia es la proporción de la deuda con respecto a los ingresos, que hemos venido reduciendo de manera importante”, remarcó. Ayudándose en un cuadro realizado por el ministerio de Economía, mostró que la relación entre la deuda total, más allá del año en que venza el compromiso, y los recursos cayó del 247% en diciembre del 2002 (se necesitaban entonces dos años y medio de ingresos para cancelar las obligaciones) a un 66% al 31 de julio de este año. “Este elemento es el más importante, porque es el que va a terminar haciendo viable a la provincia. Cuanto menos implique, cuanto menos impacto tenga la deuda sobre los ingresos totales, más libertad de movimiento tendremos”, aseguró. Fuente: APF.